Noviembre llega cada año y todos comienzan a reflexionar sobre lo que tienen que agradecer. Sacamos el agradecimiento junto con la otra decoración navideña y tan pronto como terminan las vacaciones, lo empacamos de nuevo hasta el próximo noviembre. ¿Y si elegimos ser agradecidos todo el año? ¿Qué pasaría si elegimos enfocarnos en una cosa, por la que estamos agradecidos cada día, cada semana, cada mes?
Los beneficios del agradecimiento han sido ampliamente investigados.
El agradecimiento mejora las relaciones.
Todo el mundo tiene la necesidad y el deseo de ser apreciado: cónyuges, hijos, padres, amigos, compañeros de trabajo, incluso los extraños que conocemos de pasada. Cuando expresamos gratitud por las personas, las hacemos sentir validadas y eso mejora la calidad de nuestras relaciones con ellas.
El agradecimiento crea satisfacción.
Los medios de comunicación nos dicen constantemente que compremos más, hagamos más, nos veamos así o actuemos así. Al elegir ser agradecido, puede ignorar estos mensajes y abrazar la satisfacción.
El agradecimiento se siente bien.
¿Sabes lo feliz que te sientes durante las vacaciones? Cuando elige contar sus bendiciones y dirigir su corazón y sus pensamientos hacia la gratitud, le siguen los sentimientos cálidos y confusos.
El agradecimiento nos mantiene saludables.
Reflexionar sobre aquello por lo que estamos agradecidos reduce el estrés. Los sentimientos de agradecimiento tienen un tremendo valor positivo para ayudar a las personas a enfrentar los problemas diarios. El agradecimiento y el optimismo fortalecen nuestro sistema inmunológico.
El agradecimiento cultiva la humildad.
Cuando elegimos estar agradecidos por las cosas grandes y pequeñas de nuestra vida, fomentamos un corazón de humildad y un espíritu de bondad.
El agradecimiento es contagioso.
Cuando nos sentimos inspirados por el agradecimiento de los demás, también genera nuestros propios pensamientos y acciones de agradecimiento.
El agradecimiento produce positividad.
Cuando estamos intencionalmente agradecidos, naturalmente redirige nuestros pensamientos para ver lo bueno en otras personas y en nuestra vida cotidiana.
El agradecimiento promueve la generosidad.
Cuando estamos agradecidos por lo que tenemos, podemos sostener nuestra abundancia con la mano abierta y dar libremente a los demás. convertirse en una bendición para los demás.
El agradecimiento aumenta la simpatía.
Cuando estás agradecido, las personas te ven de manera positiva y, naturalmente, les gustas y quieren estar cerca de ti.
Todos los días podemos elegir ser agradecidos y experimentar los beneficios. A veces, es más fácil concentrarse en lo que no tenemos que en lo que sí tenemos. Tómese el tiempo para hacer una lista para usted. A ver cuántas cosas se te ocurren. Puede ser cualquier cosa, desde algunos buenos amigos hasta un aumento en el trabajo.
Aquí algunas ideas
- Buena salud
- fines de semana
- Mascotas
- Aire fresco
- Una cama para dormir
- Risa
- Carros
- Luz solar
- Agua limpia
- Celulares
- Amar
- Libros
- Amabilidad de los extraños
- Arte
- Vacaciones
- arcoiris
- despertar hoy
- Tubería interior
- Vista
- Tiendas de comestibles
- puestas de sol
- Tu mente
- Empleo
- Diversidad
- Luna y estrellas
- Electricidad
- Aire acondicionado
- Audiencia
- océanos
- Medicina moderna
- Música
- Ropa de abrigo
- Una conexión a Internet
¿Cuántas cosas puedes agregar a la lista?
¡Feliz día de acción de gracias!
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