El masaje es una técnica empleada con las manos, a fin de trabajar áreas comprometidas en el cuerpo que están tensas por diversas razones. Es una alternativa muy antigua en el mundo para tratar los dolores musculares de espalda, piernas, brazos, entre otros. Con los masajes relajantes se pretende aliviar estos dolores con una grata sensación de bienestar.
Desde tiempos remotos, los masajes tienen fines terapéuticos que han funcionado de maravilla para la apertura de establecimientos como los spa. Acá te indicaremos algunos consejos y maniobras para realizar una sesión efectiva para tu pareja. ¡Al final del día lo sabrá agradecer!
Consejos
En primer lugar, cada movimiento que hagamos con las manos será tan sutil que nuestra pareja experimentará una suavidad increíble. No debemos cambiar la velocidad en un instante porque su cuerpo podría tornarse tenso a tal punto de rechazar las manos que están trabajando para su bienestar. El factor sorpresa, al menos en un masaje relajante, no es tan favorable.
No es necesario que tenga mayor intensidad de la esperada. No debemos centrar la atención en malestares antiguos que no han sido curados, sino amenizar la relación de pareja con este ejercicio. Si buscas disminuir su nivel de estrés o lo empleas como técnica de conquista, no te enfoques en equilibrar una zona del cuerpo que no conoces de principio.
Haz el masaje con buena actitud. Si tu novio/a se acerca a ti para solicitar un masaje es porque tuvo un día caótico en su trabajo o universidad. Sé receptivo/a con esta intención para abrir las dimensiones a la intimidad. Ocupa la mente en pensamientos positivos para transmitir en su cuerpo la buena vibra que tanto le hace falta.
Finalmente, utiliza aceites aromatizantes como recursos adicionales para optimizar este ritual terapéutico o amoroso . Funciona a la perfección en manos ásperas, cuyo roce no es tan cómodo como lo deseado. No lo apliques en su cuerpo directamente, sino frota con las manos para esparcir gradualmente el líquido en la espalda, pecho, piernas o brazos.
Maniobras
- Vaciamiento: es el clásico movimiento que harás de abajo hacia arriba, como lo presentan la mayoría de los videos destinados en aquellos aprendices que están interesados en los masajes. Son técnicas que abren la piel para llevar a su estado más relajado. Para que funcione mejor, realiza tres sesiones cada 2 minutos.
- Oscilaciones: son movimientos del centro hacia afuera. El/la masajista hará algunas maniobras utilizando su propio peso corporal para transportar las manos hasta las zonas más extremas del paciente o pareja para ser integral en su trabajo. Tiende a liberar la presión corporal, con intervalos de 2 minutos por sesión.
- Deslizamientos: el nivel es más exigente con esta técnica, aunque mantenga similitud con las oscilaciones. Es completamente normal que la respiración aumente en su ritmo. Repite cada 3 minutos para brindar un pequeño descanso al receptor de los masajes.
- Presión con los pulgares: ideal para ejercerlo en la zona de la columna que está comprometida por posturas incómodas. Podrías realizar un poco de presión, pero al final, tendrás que disminuir esta sensación para no causar más daño en esta área.